Cien metros llanos

Tan dulce suena, tan creído lo tengo,
tan sufrido lo llevo, que me cansó.
He decidido dejar de amar,
he decidido no sufrir más.
Me he vuelto egoísta, me he sentido dañado,
no deseo ser cobarde, no deseo tener miedo,
miedo a perderla, miedo a encontrarla,
a no quererla, a que no me quiera.
No existen razones para que el amor exista,
solo existen sensaciones, solo existen creencias.
No quiero volver a ser víctima.
No quiero ser verdugo.
No quiero vivir y dejar vivir,
quiero morir y matar.

Morir mi vida un instante, matar mis sentimientos,
el espíritu es voluntad, conciencia y sentimientos.
Y me debato entre matarlos, controlarlos o soltarlos.
Las dos primeras son muy difíciles.
La última me llevara a la ruina.
¿Que ruina? Si estoy hecho pedazos.

No quiero pensar, solo estar.
No quiero estar sin pensar.
No creer en nada, no temerle a nada.

Sufrir y que sufran.
Amar y que me amen.
Odiar y que me odien.

No quiero ser persona.
No quiero ser mascara.
No quiero ilusiones.
No quiero metas.

¡Quiero experiencias!:
Nuevas, ridículas, alucinantes,
innovadoras, atrevidas, desgarradoras.

Me canse de alegrías y bellezas.
Me canse de agonías y tristezas.

Quiero explotar, aunque sea solo por un tiempo.
Quiero arruinar, todos los momentos.
Quiero ser sincero hasta las últimas consecuencias
Que no me importe nada, no decir lo siento.

Volveré a las raíces,
seré un salvaje y veré si sobrevivo.
Haré lo que necesite para sobrevivir.
Seré impulsivo, trasgresor sin medir.

Seré cazador, indisciplinado,
voraz, ardiente, descontrolado,
me costara vencer mis barreras,
venceré mis miedos mas cuestionados,
gritare a los vientos, bailare sin parar,
saltare, cantare, volaré sin rumbo,
subiré con el último aliento todas las montañas,
venceré desafíos, me probare que puedo,
que el mundo también es mío,
competiré, ganaré, gritaré, escupiré, eructaré
y me reiré de todos,
los que dirán que estoy loco, atormentado y sufrido,
no me importa, quiero experimentar, quiero desafíos
y que venga quien quiera a enseñarme
de su amor, su paz, su armonía y su felicidad.

Me cansé de buscarla todos los días,
siempre se me escapa, como esa utopía.
La voy a dejar ir, que se vaya bien lejos
y veré si la extraño o si era otra mentira.

Viviré otras mentiras,
otros desafíos que nunca me propuse,
que no conocía,
subiré hasta el cielo, bajaré al infierno,
pasaré por el purgatorio y me reiré de todos
y lloraré por todos.
Por aquellos que saben que ahora están vivos,
pero condenados sin remedio a morir en el vacío.
No seremos nada ni nada hemos sido.
¿Porque vivir por algo sin sentido?
Recorreré el mundo buscando lo que nunca encontraré
y que quizás esté dentro de mí.